Amnistía Internacional ha denunciado hoy un fuerte aumento de las palizas policiales y de las detenciones masivas de manifestantes, así como de los actos de intimidación contra defensores y defensoras de derechos humanos en Honduras desde el golpe de Estado de junio, y ha advertido de que los derechos fundamentales y el Estado de derecho corren grave peligro en este país centroamericano.
El presidente Zelaya regresó al país el lunes 21 de septiembre y actualmente está en la embajada de Brasil en Tegucigalpa, la capital de Honduras.